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Un manómetro, también conocido como medidor de presión, es una herramienta esencial para cualquier conductor. Sirve para medir la presión del aire dentro de los neumáticos de tu vehículo. Al mantener la presión correcta en tus llantas, estarás contribuyendo a:

• Ahorrar combustible: Los neumáticos con la presión adecuada reducen la resistencia a la rodadura, lo que significa menos gasto de gasolina.
• Aumentar la vida útil de las llantas: Una presión correcta distribuye el peso del vehículo de manera uniforme, evitando un desgaste prematuro.
• Mejorar el manejo: Las llantas con la presión adecuada ofrecen una mejor adherencia al suelo, lo que se traduce en una conducción más segura y estable.
• Reducir el riesgo de accidentes: Los neumáticos desinflados son más propensos a sufrir daños y pueden reventar, lo que puede causar accidentes.

¿Qué significa 12 bar / 174 psi?

• 12 bar: Esta es una unidad de medida de presión.
• 174 psi: Esta es otra unidad de medida de presión, más comúnmente utilizada en los países de habla inglesa.

Ambas medidas indican la misma presión máxima que puede medir tu manómetro.

¿Cómo usar tu manómetro?

1. Ubica la válvula de aire: Esta suele estar ubicada en la parte exterior de la llanta, con una tapa protectora de plástico.
2. Retira la tapa: Usa la herramienta adecuada para retirar la tapa de la válvula sin dañarla.
3. Conecta el manómetro: Coloca la punta del manómetro firmemente sobre la válvula y presiona.
4. Lee la presión: Observa el indicador del manómetro para conocer la presión actual de la llanta.
5. Ajusta la presión (si es necesario): Si la presión es demasiado baja o alta, utiliza un inflador para ajustarla a la presión recomendada por el fabricante de tu vehículo. Esta información suele encontrarse en una etiqueta dentro de la puerta del conductor o en el manual del propietario.
6. Vuelve a verificar la presión: Una vez que hayas ajustado la presión, vuelve a medir con el manómetro para asegurarte de que sea la correcta.
7. Repite el proceso en las demás llantas: Es importante revisar la presión de todas las llantas de tu vehículo, incluyendo la de repuesto.

Recomendaciones adicionales:

• Revisa la presión de las llantas regularmente: Lo ideal es hacerlo al menos una vez al mes y antes de un viaje largo.
• Verifica la presión de las llantas en frío: La presión de los neumáticos aumenta ligeramente cuando se calientan por la fricción con el suelo. Por eso, es recomendable medir la presión cuando las llantas estén frías, es decir, después de haber estacionado el vehículo durante al menos 3 horas.
• Utiliza un manómetro confiable: Un manómetro preciso es esencial para garantizar que la presión de tus llantas sea la correcta.